La Xunta tiene en marcha tres planes de creación del suelo industrial en la comarca, para ampliar el polígono pontevedrés de O Campiño, crear el de Fragamoreira en Poio, y reordenar la antigua central de transportes de A Reigosa, en Ponte Caldelas, para acoger cualquier tipo de actividad y no solo logística. Estas tres actuaciones suman alrededor de 800.000 metros cuadrados, pero hasta que estén plenamente operativos aún pasarán años, por lo que Pontevedra y su comarca debe acudir a los terrenos aún disponibles, es decir, una decena en A Reigosa y quince solares en Barro.
Este último polígono supera ya el 78% de ocupación tras la adquisición de tres parcelas por la empresa pontevedresa Lago. Son 8.453 metros cuadrados comprados por cerca de un millón de euros. Ya tienen dueño unos sesenta solares, comprados por más de una veintena de empresas, entre ellas Froiz, Hijos de Rivera, Frutas Moncho, Transfrigo o Mariscos Alumar, entre otras. Froiz es la que más suelo posee, cerca de veinte solares para instalar su nuevo centro logísticos, que podría comenzar su actividad en el primer semestre de 2025. Esta nueva instalación avanza en su construcción, que ocupa una superficie de 24.000 metros cuadrados y estará dedicada al almacenamiento y distribución de productos de alimentación, bodega y droguería.
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