El polígono industrial de Carballo, aquel que nació con un ámbito comarcal en la parroquia de Bértoa, acumula ya muchos años de crecimiento incesante, hasta convertirse en lo que es ahora: uno de los polos de desarrollo económico más notable de la provincia y de Galicia. Los números son los que son: 237 empresas, facturación agregada de más de 280 millones de euros y 2.044 puestos de trabajo directos, además de un amplio movimiento de vehículos pesados vinculados a las propias empresas del parque, unos 577, según los cálculos que maneja la comunidad de propietarios.
Este crecimiento no va a parar. Está en marcha el proyecto de ampliación, una tercera fase que sumará 554.000 metros cuadrados más, y también el de la circunvalación hacia el sur, hacia Ordes y Santiago (por los otros puntos tiene conexión directa con la AG-55 y la autovía da Costa da Morte). Los empresarios preferirían unos plazos más rápidos, pero ya no hay vuelta atrás. Cuando se terminen las obras, la superficie será de 1,8 millones de metros cuadrados en las tres fases, solo superado en la zona por el de Sabón. Este futuro lo gestionará la nueva junta directiva conjunta, elegida el pasado 25 de mayo, con muchos desafíos: más empresas, transporte, trabajadores y empleados.
Leer más: La Voz de Galicia